Misiones 2025: El mapa de una crisis de crecimiento y cables calientes
Análisis de la demanda eléctrica en Misiones al cierre de 2025: récords de consumo, tarifas elevadas y una infraestructura al límite.

Al concluir diciembre de 2025, el balance energético de Misiones presenta una paradoja estadística. Por un lado, las planillas oficiales del IPEC muestran una provincia que no para de demandar energía; por otro, los grupos de WhatsApp de vecinos en Posadas, Oberá o Iguazú siguen siendo el termómetro de una red que "no aguanta".
La década del salto: De 2013 a 2025
Si observamos la serie histórica iniciada en 2013, el crecimiento de la demanda total ha sido exponencial, pero con picos estacionales cada vez más agresivos. En 2013, la demanda total de enero rondaba los 195.753 MWh. En 2024, ese mismo mes superó los 305.692 MWh, un incremento superior al 55% en una década.
En 2025, los datos preliminares de enero confirmaron un nuevo récord: el consumo residencial subió un 19% interanual, impulsado por temperaturas que promediaron los 34.5°C, muy por encima de los 31°C del verano anterior. Este aumento no es solo demográfico; es climático. Misiones se ha vuelto una provincia "electro-dependiente" para sobrevivir a los veranos, lo que pone a Energía de Misiones SA (EMSA) en el ojo de la tormenta.
El modelo EMSA: ¿Empresa de servicios o ente recaudador?
La naturaleza jurídica de Energía de Misiones SA sigue siendo motivo de debate. Aunque es controlada por el Estado provincial, opera bajo el derecho privado. Esta estructura le ha permitido una agilidad comercial que, según críticos y exfuncionarios, se ha volcado más hacia la recaudación que hacia la eficiencia del servicio.
En 2025, Misiones se consolidó como una de las provincias con las tarifas más caras de Argentina para los usuarios del segmento N1 (altos ingresos y excedentes), llegando a facturas promedio de $79.400 en agosto de este año, superando por casi un 20% el promedio nacional.
Dato Clave: Mientras la tarifa sube, la calidad del servicio es percibida como "precaria". Los cortes programados —como el apagón total de septiembre de 2025 por mantenimiento de Transener o los cortes diarios en Iguazú por caída de ramas y falta de podas— evidencian que el sistema de distribución de EMSA trabaja al límite de su capacidad térmica.
Las obras "históricas" frente a la solución de "parches"
El cierre de 2025 estuvo marcado por un anuncio de alto impacto: la licitación de la línea de alta tensión de 132 kV que unirá San Isidro (Posadas), Leandro N. Alem y Oberá. Con una inversión de 75 millones de dólares, esta obra promete estabilidad para 100.000 familias en la zona centro. Sin embargo, para el usuario de a pie, la realidad es distinta:
- Problemas de tensión: Los "bajones" de luz siguen quemando electrodomésticos en los barrios periféricos.
- Mantenimiento reactivo: Gran parte de los cortes en 2025 no fueron por falta de generación, sino por fallas en la distribución local.
- Generación propia: Misiones genera el 30% de su energía (biomasa, solar y Urugua-í), pero la red de transporte sigue siendo el cuello de botella.
La Asimetría del NEA: ¿Por qué Misiones paga más?
A diferencia del resto del país, el Noreste Argentino (NEA) comparte una vulnerabilidad: la ausencia de una red de gas natural. En Misiones, un hogar promedio (consumo de 400 kWh mes) enfrenta costos cercanos a los $82.500, superando a Chaco ($71.200) y Corrientes ($68.900).
La gran diferencia radica en el Valor Agregado de Distribución (VAD), el componente que maneja EMSA. Mientras otras provincias usan fondos de coparticipación para mitigar aumentos, en Misiones la política ha sido de traslado directo al usuario. Esto convierte a la factura de luz en un "impuesto a la supervivencia" en veranos cada vez más hostiles.
Fuentes: IPEC Misiones, CAMMESA, Relevamientos de Energía de Misiones SA (EMSA).











