Argentina al desnudo: La mayor filtración de datos de la historia expone la vida privada de todo el país
Una filtración de 1TB expone sueldos, deudas y registros de salud de millones de argentinos. Los datos, actualizados a noviembre de 2025, circulan en la dark web.

En lo que ya se perfila como la catástrofe de seguridad digital más grave en la historia de la República Argentina, una filtración masiva de datos ha dejado expuesta la intimidad financiera, laboral y personal de prácticamente toda la población. No se trata de registros antiguos o bases de datos obsoletas: la información contiene movimientos registrados hasta noviembre de 2025, lo que implica que el drenaje de datos podría seguir activo en este preciso momento.
La noticia, que ha pasado desapercibida para los grandes conglomerados de medios, estalló en las últimas horas tras la denuncia de especialistas en ciberseguridad y sitios internacionales dedicados al monitoreo de la dark web.
El origen del escándalo: SudamericaData y la sombra de la ilegalidad
La filtración apunta directamente a SudamericaData, una entidad que se dedica a la venta de informes comerciales y patrimoniales. Según reportes de Daily Dark Web, la empresa habría continuado operando bajo el nombre de “WorkManagement” luego de enfrentar reveses judiciales en 2023.
Lo alarmante de este caso no es solo el volumen —superior a 1 Terabyte (1.000 GB)— sino la procedencia de la información. Expertos sugieren que estas bases no son de producción propia, sino un compendio de bases de datos presuntamente obtenidas de forma ilegal a través de funcionarios públicos y empleados corporativos con acceso a nodos centrales de información estatal.
El reconocido programador y especialista en tecnología, Maximiliano Firtman, dio la voz de alarma a través de sus redes sociales, calificando el hecho como la mayor filtración de datos personales del país.
Un inventario del horror digital: ¿Qué saben de nosotros?
El desglose de la información filtrada parece una radiografía total del ciudadano argentino. Los archivos, cuya estructura se puede observar en capturas de pantalla obtenidas por este medio, están organizados por organismos y categorías que afectan todos los aspectos de la vida civil:
- ARCA (Ex AFIP): Una base de datos de ciudadanos que supera los 60 millones de registros, incluyendo deudas, categorías fiscales y movimientos patrimoniales.
- DNRPA (Automotores): Más de 75 millones de registros de propiedad automotor, vinculando vehículos con sus dueños de forma directa.
- ANSES: La joya de la corona del espionaje masivo. Se reportan 176 millones de registros que contienen relaciones laborales, sueldos detallados, domicilios, correos electrónicos y teléfonos.
- Telefonía móvil: Bases de datos de clientes de Claro, Movistar y Personal con más de 100 millones de entradas.
- Marketing y Salud: Listas masivas para campañas de marketing y bases de datos sobre beneficiarios de subsidios estatales y jubilados.
El silencio que aturde
A pesar de la magnitud del evento, la respuesta oficial es inexistente. La filtración no solo pone en riesgo la privacidad, sino que entrega en bandeja de plata las herramientas necesarias para una ola masiva de estafas bancarias, suplantación de identidad y extorsiones. Con el detalle de los sueldos y domicilios actualizados a hace apenas unos días, el nivel de vulnerabilidad de la población es total.
El hecho de que la base incluya archivos como Automotores2025.mdb o Padron_AFIP_09_2025_docu.csv confirma que el acceso a las fuentes oficiales ha sido sostenido y reciente. No es un "hackeo" aislado, sino una estructura de exfiltración que ha operado con total impunidad.
¿Estamos todos?
La respuesta corta es: Sí. Dada la cantidad de registros que superan con creces la población total del país (debido a la acumulación de datos históricos y activos), es prácticamente imposible que un argentino con actividad económica, un teléfono a su nombre o un vehículo no figure en este paquete de datos.
Desde Fracran, instamos a la población a extremar las medidas de seguridad: cambiar contraseñas, activar la verificación de dos pasos en todas las aplicaciones sensibles y desconfiar de cualquier comunicación telefónica o vía mail que utilice datos personales para validar una supuesta identidad oficial.
La Argentina está al desnudo en la red, y mientras el poder político mira hacia otro lado, los datos de 46 millones de personas han pasado a ser propiedad del mejor postor en los mercados negros de internet.
Fuentes:
- Investigación propia Fracrán Noticias
- Daily Dark Web (Dailydarkweb.net)
- Reporte de Maximiliano Firtman en X (ex Twitter) (@maxifirtman)
















