Ferias Francas de Misiones: 30 años uniendo al productor y al consumidor
A tres décadas de su creación, las Ferias Francas se consolidan como un pilar de la economía social misionera, con más de 1.500 familias productoras y ventas que superan los 57 mil millones de pesos anuales.
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Este martes 26 de agosto se conmemoran 30 años de la creación de las Ferias Francas en Misiones, un modelo que revolucionó la economía social de la provincia y que hoy se erige como un puente insustituible entre los productores de la agricultura familiar y los consumidores. Lo que comenzó como una iniciativa de un puñado de agricultores es hoy un motor económico que moviliza más de 57 mil millones de pesos al año.
La primera feria se realizó el 5 de septiembre de 1995 en la Plazoleta Güemes de Oberá, impulsada por un grupo de productores que buscaban una alternativa a la crisis de los precios del agro en aquella década. Tres décadas después, el sistema no solo sobrevive, sino que se ha expandido y fortalecido: actualmente, involucra a más de 1.500 familias de productores que comercializan sus productos frescos en más de 80 ferias distribuidas en cerca de 40 municipios misioneros.
El éxito del modelo radica en su simpleza y potencia: la venta directa, sin intermediarios. Esto garantiza precios más justos tanto para quien produce como para quien compra, además de asegurar el acceso a alimentos frescos, de estación y de alta calidad, cultivados a pocos kilómetros de las mesas de los consumidores.
Un pilar de la economía social
Más allá de las cifras, las Ferias Francas representan un bastión de la soberanía alimentaria y el arraigo rural. Permiten que miles de familias campesinas puedan vivir de su trabajo en la chacra, diversificando su producción y encontrando un canal de venta seguro y constante. Este sistema fomenta la organización, el cooperativismo y el intercambio de saberes entre los propios productores.
Según datos del sector, el impacto económico es notable. Se estima que las ventas anuales superan los $57.000 millones, un monto que se reinvierte directamente en el circuito local, fortaleciendo las economías de cada pueblo y paraje donde funciona una feria.
A 30 años de aquel primer paso en Oberá, las Ferias Francas no son solo un lugar de compra y venta, sino un espacio de encuentro social y cultural que se ha convertido en un patrimonio de todos los misioneros, demostrando la resiliencia y el potencial de la agricultura familiar.
El rol de estos productores ya había sido destacado por este medio en una nota anterior sobre el presente de la agricultura familiar en la provincia.
Fuentes:
- El Misionero
- Radio Up
- Economis
- Primera Edición
- Canal 12 Misiones

